jueves, 14 de marzo de 2013

Coche.

Sentado sobre el asiento deshecho del coche. Mirando a través de la ventanilla empañada el tiempo correr. Inútilmente intentar encender la radio desempolvando el botón de "on" sin resultado  ya que hace tiempo que dejo oír su ultima cancion. Querer levantar el cuerpo del asiento y darse cuenta de que esta tan desgastado como aquel viejo coche sin motor. Comprender que ya jamas volverá a dar un paso y menos aun recorrer las carreteras en busca de algo nuevo. Mirar a su alrededor y encontrarse rodeado de oxido. Desesperado hacer girar la llave esperando oír el clásico ruido de arranque y apretar el acelerador por mera costumbre y volver a darse cuenta, esta vez mas en profundidad, que estaba atado allí para siempre sin posibilidad de volver a recuperar lo que una vez perdió . Encerrado en aquella tumba de metal, rodeado de una naturaleza que poco a poco iba amenazándole con unas enredaderas que van creciendo alrededor de su cuello. Estaba muerto, y al darse cuenta cerro sus ojos.

No hay comentarios: